FLASHBACK
Copa Panamericana
Final: Argentina - Uruguay
Triunfo Argentino
Jugué a un nivel que jamás había jugado, con la misma garra que ponía en cada partido, pero potenciada al máximo. Obtuvimos un triunfo. Ajustado, pero un triunfo. Tener a mi familia, amigos y novio en la tribuna siempre era una ayuda. Una gran ayuda. Terminar llorando en la cancha, y con el abrazo de una contrincante. Una jugadora del equipo Uruguayo, felicitándome. Geraldine. Jugar contra ella fue duro, pero lindo a la vez. Recordando las canchas suizas...
Geraldine: sos de otro mundo pendeja
Paula: vos Gege, vos...
Geraldine: andá a festejar, gritá, bailá, saltá, que este triunfo es tuyo
Paula: (abrazándola más fuerte) te llamo así nos veamos antes de que me vaya. Buen partido
Geraldine: ojalá nos volvamos a cruzar en algún club
Paula: ojalá amiga... gran partido, sos espectacular
Me dio un beso en el cachete, y se fue con su equipo al vestuario. Perder de local es difícil... pero ella ahí estaba para felicitarme y aguantarme a pesar de todo. Como siempre lo hizo. Atendimos a la prensa en los vestuarios, y recién nos dejaron salir al reencuentro con la familia, y demás. Me tiré encima de Pedro. Sus brazos me agarraron, como siempre. Y su boca me besó, como siempre también
Pedro: ganaste
Paula: (ríe) si...gané
Pedro: sos increíble, ¿sabes?
Paula: gracias, gracias por venir, aguantarme
Pedro: son como unas vacaciones
Se río, me dio un pico, y yo seguí los saludos con la familia, Zaira, y hasta Hernán que ahí me acompañaba. El largo abrazo con papá fue interrumpido por un señor... alto, de traje, junto a Carla, mi entrenadora. Me separé, y el señor me extendió la mano
Carla: perdón que te joda Pau... ¿un segundo tenes?
Paula: (mirando a Zaira y Pedro) estem... si, un rato si
Carla: bueno, vamos al bar
No sabía quien era el señor, pero si me imaginaba que quería: propuestas de trabajo. Difícil... muy difícil decisión. No estaba lista, no quería escuchar nada, pero ya no había mucho más remedio, sólo había que afrontar la situación, y nada más.
- Me presento, soy un representante de la confederación argentina de hockey Paula...te vi jugar, y no tengo otra cosa que felicitarte
- Muchas gracias -contesté sonriendo
- Bueno...tengo a cargo las propuestas internacionales de entrenadores tanto de acá, Europa, Estados Unidos, Canadá, Australia, y algunos lugares más... sorpresivamente, casi todos estos clubes quedaron impresionados con vos. Bueno, no sorpresivamente, porque es algo más que normal después de haber visto tu juego. ¿Estás para cerrar un contrato?
- Emm -reí nerviosa- me parece medio rápido todo ¿no?
- Capaz que sí... pero, vos sabías que a algun lugar después de acá te tenías que ir
- No, no sabía... -volví a reír- nunca lo pensé en realidad. Por eso me tomas de sorpresa, yo no tomé ninguna decisión, ni nada
- Igual, -se metió Carla- eso es lo de menos... Si tenemos propuestas concretas, la decisión es más fácil de tomar. Si o no
- Los lugares que te acabo de nombrar son propuestas concretas. Tengo que presentarte a esta gente que te quiere a vos Paula, y a vos Carla como representante por supuesto. Hago de mediador, simplemente. A la noche es la cena, en el hotel... ahí van a estar todos, para cerrar contratos, o simplemente conocerse. Así que las espero, pensalo Paula, no desaproveches
Me saludó y se fue. Yo no quería ni mirar a Carla, pero sentir sus ojos clavados en mí, hicieron que levante mi vista. Sentía algo raro... una adrenalina de hockey, de juego, de vida de club,de partido. Me estaban ofreciendo jugar en otro país, y en primera. Era ese sentimiento de... hockey simplemente. Del amor a un deporte, de que esto era mi vida en serio...pero el miedo, la familia, los amigos, y el noviazgo, jugaban en contra. Muy en contra, y me frenaban hasta ponerme en punto muerto basicamente
Paula: no puedo
Carla: si podes
Paula: no puedo, en serio
Carla: ¿por qué carajo Pau? Dale, es tu sueño
Paula: porque (suspira) mi vida está en Argentina
Carla: tu vida está en una cancha... te vas a arrepentir siempre
Paula: que se yo si me voy a arrepentir, pero
Carla: (interrumpiendo) sos una cagona, eso sos. Volvé a Buenos Aires. Volvé a tu casa. Vas a estar perdida... después de esto (Refiriéndose a la Copa) tenes que avanzar... no ir para atrás. Pero hacé lo que quieras
Carla se fue, y me dejó parada sola. Confundida. Lamentablemente tenía razón... ya no podía volver, y seguir haciendo nada. No iba a estudiar, porque no era mi vocación, y no iba a hacer algo que no me gustaba. El problema era que lo único que me gustaba era el hockey. Al estar sola se me acercó Pedro, y me corrió un mechón de pelo de la cara
Pedro: ¿qué pasó?
Paula: nada
Pedro: dale, en serio
Paula: ¿por?
Pedro: tu cara amor
Paula: tengo propuestas para jugar en el exterior
Pedro: (suspira rascándose la nuca) sabíamos que este momento iba a llegar
Paula: no... no sabía. Nunca lo pensé Pedro, en serio
Pedro: bueno Pau... llegó. Y tenes que hacerlo
Paula: ¿qué? (sorprendida)
Pedro: lo que estás escuchando... se que un gran freno para que no aceptes, soy yo. Y ya no lo quiero ser. No tengo ganas de estar en este lugar. Tu talento, porque lo que tenés es talento, mezclado con magia, te va a llevar siempre a lo más alto. Y culpa mía, te vas a lo más bajo
Paula: no es así Pepe, no digas boludeces
Pedro: es así, y está todo bien... porque te amo, quiero que te vaya bien. Y justamente por eso, quiero que vayas a donde tengas que ir, y aceptes todo lo que tengas que aceptar, que a vos te haga bien
Paula: vos me haces bien a mí
Pedro: el hockey te hace bien a vos, es además de tu pasión, un trabajo Paula. La comida no te va a caer del cielo toda tu vida. Y ya está... hay que asumir
Paula: ¿que tengo que asumir?
Pedro: la realidad Pocha... ya está. Yo en dos horas voy a estar arriba de un avión, y no quiero que estes al lado mío, sinceramente. Quiero que te quedes acá, cierres tus negociaciones, y te vayas a la mierda. Nunca vas a avanzar en Argentina, nunca.
Paula: tengo miedo... no quiero separarme de vos, de Zaira. Tengo miedo a que me vaya mal, a ser un fracaso, a no poder manejarme, a todo. A extrañar...
Pedro: si no probas nunca vas a saber. Te tenes que ir Paula, te vas a arrepentir toda tu vida. Toda tu vida
Paula: ¿y lo nuestro?
Pedro: ¿te tengo que ser sincero?
Paula: lo que más puedas
Pedro: no estoy preparado para una relación a distancia... no estamos preparados. Sólo nos va a traer problemas, y extrañarnos más
Paula: entonces... ¿me estas dejando?
Pedro: te estoy dejando hacer tu vida sin ninguna cadena
Paula: Pedro (suspirando)
Pedro: en serio... es por tu bien. Paula, Buenos Aires no es tu lugar. Te tenes que ir. Por cuanto amor me tengas a mí, por lo menos. Hacelo por mi. Yo no soy feliz teniéndote al lado mío sin que vos cumplas tus sueños. Yo nunca voy a ser feliz así. Nunca. La vida nos va a volver a cruzar, estoy seguro...y si no es así, me voy a acordar siempre de vos. Mi primer amor, y siempre vas a ser eso... ninguna mujer te va a reemplazar
Las lágrimas empezaron a caer... Pedro lo decía tan real. De una manera convincente, de una manera que no dudaba en que tenía razón en cada palabra. Lo decía con amor, más que nada...nunca pensé que una persona podía pensar tanto en mí. Lo abracé con tanta fuerza, que ninguno de los dos podía respirar. Vi lágrimas en él, y dupilicaron las mías
Paula: te amo
Pedro: te aseguro que yo también... pero esto te va a hacer bien a vos. En serio.
Paula: gracias por todo lo que haces e hiciste por mi
Pedro: tampoco es que nos vamos a morir (Secándose las lágrimas) un distanciamiento simplemente. Te voy a tener siempre presente. Para toda la vida
FIN FLASHBACK
Y esa fue nuestra despedida. Hasta recordarlo a él me traía lágrimas. Capaz esto fue hace un buen par de meses... pero sentía que no lo veía hace 10 años. Desde Canadá, Pedro estaba presente en cada día mío. Por respeto a él, y para no herirnos más, no hablábamos muy seguido, solo cuando alguno de los dos lo necesitaba. No estoy capacitada para tocar a ningún otro hombre, y no creo poder estarlo nunca. Hoy mi vida empezaba y terminaba en el hockey.
Amanecer con su foto en mi celular, irme a dormir con la misma imagen. Pensarlo cada segundo, en la cancha, fuera de la cancha. Con tantas cosas para decirle, con tanto futuro que habíamos pensado juntos. Lamentablemente, hoy la realidad era otra, y esa realidad me tenía a miles de kilómetros de él. Miles.
Ustedes querían capítulo, acá está! Esperamos que les guste y bueno... ahora a esperar los próximos 20 capítulos de la segunda temporada. Esperamos recibir, también, comentarios de que les pareció!!! Besos, gracias por leer! ♥
Carla: (interrumpiendo) sos una cagona, eso sos. Volvé a Buenos Aires. Volvé a tu casa. Vas a estar perdida... después de esto (Refiriéndose a la Copa) tenes que avanzar... no ir para atrás. Pero hacé lo que quieras
Carla se fue, y me dejó parada sola. Confundida. Lamentablemente tenía razón... ya no podía volver, y seguir haciendo nada. No iba a estudiar, porque no era mi vocación, y no iba a hacer algo que no me gustaba. El problema era que lo único que me gustaba era el hockey. Al estar sola se me acercó Pedro, y me corrió un mechón de pelo de la cara
Pedro: ¿qué pasó?
Paula: nada
Pedro: dale, en serio
Paula: ¿por?
Pedro: tu cara amor
Paula: tengo propuestas para jugar en el exterior
Pedro: (suspira rascándose la nuca) sabíamos que este momento iba a llegar
Paula: no... no sabía. Nunca lo pensé Pedro, en serio
Pedro: bueno Pau... llegó. Y tenes que hacerlo
Paula: ¿qué? (sorprendida)
Pedro: lo que estás escuchando... se que un gran freno para que no aceptes, soy yo. Y ya no lo quiero ser. No tengo ganas de estar en este lugar. Tu talento, porque lo que tenés es talento, mezclado con magia, te va a llevar siempre a lo más alto. Y culpa mía, te vas a lo más bajo
Paula: no es así Pepe, no digas boludeces
Pedro: es así, y está todo bien... porque te amo, quiero que te vaya bien. Y justamente por eso, quiero que vayas a donde tengas que ir, y aceptes todo lo que tengas que aceptar, que a vos te haga bien
Paula: vos me haces bien a mí
Pedro: el hockey te hace bien a vos, es además de tu pasión, un trabajo Paula. La comida no te va a caer del cielo toda tu vida. Y ya está... hay que asumir
Paula: ¿que tengo que asumir?
Pedro: la realidad Pocha... ya está. Yo en dos horas voy a estar arriba de un avión, y no quiero que estes al lado mío, sinceramente. Quiero que te quedes acá, cierres tus negociaciones, y te vayas a la mierda. Nunca vas a avanzar en Argentina, nunca.
Paula: tengo miedo... no quiero separarme de vos, de Zaira. Tengo miedo a que me vaya mal, a ser un fracaso, a no poder manejarme, a todo. A extrañar...
Pedro: si no probas nunca vas a saber. Te tenes que ir Paula, te vas a arrepentir toda tu vida. Toda tu vida
Paula: ¿y lo nuestro?
Pedro: ¿te tengo que ser sincero?
Paula: lo que más puedas
Pedro: no estoy preparado para una relación a distancia... no estamos preparados. Sólo nos va a traer problemas, y extrañarnos más
Paula: entonces... ¿me estas dejando?
Pedro: te estoy dejando hacer tu vida sin ninguna cadena
Paula: Pedro (suspirando)
Pedro: en serio... es por tu bien. Paula, Buenos Aires no es tu lugar. Te tenes que ir. Por cuanto amor me tengas a mí, por lo menos. Hacelo por mi. Yo no soy feliz teniéndote al lado mío sin que vos cumplas tus sueños. Yo nunca voy a ser feliz así. Nunca. La vida nos va a volver a cruzar, estoy seguro...y si no es así, me voy a acordar siempre de vos. Mi primer amor, y siempre vas a ser eso... ninguna mujer te va a reemplazar
Las lágrimas empezaron a caer... Pedro lo decía tan real. De una manera convincente, de una manera que no dudaba en que tenía razón en cada palabra. Lo decía con amor, más que nada...nunca pensé que una persona podía pensar tanto en mí. Lo abracé con tanta fuerza, que ninguno de los dos podía respirar. Vi lágrimas en él, y dupilicaron las mías
Paula: te amo
Pedro: te aseguro que yo también... pero esto te va a hacer bien a vos. En serio.
Paula: gracias por todo lo que haces e hiciste por mi
Pedro: tampoco es que nos vamos a morir (Secándose las lágrimas) un distanciamiento simplemente. Te voy a tener siempre presente. Para toda la vida
FIN FLASHBACK
Y esa fue nuestra despedida. Hasta recordarlo a él me traía lágrimas. Capaz esto fue hace un buen par de meses... pero sentía que no lo veía hace 10 años. Desde Canadá, Pedro estaba presente en cada día mío. Por respeto a él, y para no herirnos más, no hablábamos muy seguido, solo cuando alguno de los dos lo necesitaba. No estoy capacitada para tocar a ningún otro hombre, y no creo poder estarlo nunca. Hoy mi vida empezaba y terminaba en el hockey.
Amanecer con su foto en mi celular, irme a dormir con la misma imagen. Pensarlo cada segundo, en la cancha, fuera de la cancha. Con tantas cosas para decirle, con tanto futuro que habíamos pensado juntos. Lamentablemente, hoy la realidad era otra, y esa realidad me tenía a miles de kilómetros de él. Miles.
Ustedes querían capítulo, acá está! Esperamos que les guste y bueno... ahora a esperar los próximos 20 capítulos de la segunda temporada. Esperamos recibir, también, comentarios de que les pareció!!! Besos, gracias por leer! ♥